Cuando se habla del tradicional licor Pacharán, es inevitable que la mente se traslade automáticamente al norte de España, en tierras navarras, lugar donde ya era bien conocido y bebido desde la Edad Media por nobles y vasallos.
Desde entonces, el disfrute de esta bebida espirituosa ha perdurado y ha ido extendiéndose año tras año. A pesar de que sean diversas las empresas que han tomado el camino de la elaboración de Pacharán, se puede decir que hay especialmente una a la que se le atribuye el extendido conocimiento del licor hoy en día: la renombrada compañía navarra Licores Baines. Gracias a ella, esta bebida fruto de la maceración de endrinas en aguardiente anisado, pasó de ser un producto local, “casero” y “no comercializado”, a ser vox populi.
Cuando se fundó en 1844 en el popular barrio pamplonés de «Rochapea», el Grupo Baines dedicó su primera etapa a la elaboración de aguardientes y licores. No sería hasta la década de los 50 cuando la compañía pasaría a ser una empresa especializada y destacada en la producción artesanal del Pacharán, su producto estrella, que incorporaría a sus fabricados junto con el anís de guindas. Ambos, productos tradicionales de la tierra navarra.